Se cayó el dictamen

Finalmente perdió validez el dictamen para poder tratar la despenalización del aborto en el recinto de la Cámara de Diputados que se había anunciado el martes, ya que no se consiguieron las firmas de apoyo suficientes. Por eso, el presidente de la comisión de Legislación Penal, Juan Carlos Vega, llamó a un plenario con Familia y Salud para el jueves a las 11.

"No se consiguieron las ocho firmas necesarias para que el dictamen fuera aprobado", le explicaron a Clarín.com desde el despacho de Vega, donde consignaron que el proyecto sólo obtuvo seis votos.

La razón de esto es que decidieron no contar el voto del legislador Jorge Rivas, quien está cuadriplégico y tiene un régimen excepcional para votar en comisión; pero específicamente la marcha atrás de Ricardo Gil Lavedra (UCR), quien se expresó a favor en un primer momento, pero luego informó que "por respeto a los diputados de su bloque no podía firmar algo sin discutirlo antes internamente con sus correligionarios".

Por su condición, Rivas tiene la autorización para enviar a un secretario a las comisiones, aunque esta vez este punto fue objeto de diálogo entre el presidente de la comisión Legal y el secretario parlamentario. "Nos dijeron que, si bien el tiene un régimen particular, por tratarse de un tema tan sensible debería haber estado al menos dos segundos", indicaron allegados a Vega.

Desde el despacho de Rivas le explicaron a este diario que de todas maneras su voto no era determinante "ya que el proyecto tenía seis firmas a favor y con la del legislador no alcanzaban a las ocho necesarias. Distinta hubiera sido la cuestión si Gil Lavedra no cambiaba de postura".

En el seno de la comisión de Legislación Penal este mediodía eran pesimistas con respecto a que este año pueda ser tratado el tema de la despenalización del aborto en el recinto de la cámara baja, ya que "el año parlamentario finaliza el 20 de noviembre y no alcanzarían los tiempos para discutirlo nuevamente y que después pase a la comisión de Familia, y de ahí a Salud".

Sin embargo, y para acortar los tiempos, se resolvió llamar a un plenario con las tres comisiones (Legal, Familia y Salud) para el jueves a las 11 en la Sala I del piso 2 del edificio anexo. El apuro es un último intento de que el proyecto avance a Diputados antes de que termine el año parlamentario y para no tener que esperar al próximo ciclo, que se inicia el 1° de febrero de 2012.

El proyecto por el que se había avanzado el martes permite la interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana 12 de gestación y lo habilita más allá de ese tiempo cuando está en riesgo la salud de la madre, para los casos de violación o graves malformaciones del feto.